En la actualidad El Salvador sigue siendo impactado fuertemente por el cambio climático, lo cual limita año con año sus capacidades de desarrollo y pone en riesgo su ya limitado presupuesto público para hacer frente a las acciones de adaptación, mitigación y atención a emergencias. Según el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), entre noviembre 2009 y octubre 2011 el país tuvo pérdidas por más de US$1,300 millones, equivalentes al 6% del PIB de 2011.


Por tanto, el acceso al financiamiento climático se ha convertido en una alta prioridad para el Gobierno de El Salvador. Hasta la fecha, existen múltiples avances en las políticas públicas, el desarrollo de capacidades, diseño de instrumentos financieros y estudios. El país está desarrollando importantes esfuerzos para acceder a financiamiento climático a través del Fondo Verde del Clima (FVC) para poder financiar medidas importantes en mitigación y adaptación, principalmente, sobre la base de los compromisos internacionales, particularmente las Contribuciones Nacionales Determinadas (NDCs), y nacionales planteados en los instrumentos como el Plan Nacional de Cambio Climático, Estrategia Nacional de Cambio Climático, el Programa de Restauración de Ecosistemas y Paisajes, Estrategia de Adaptación al Cambio Climático en la Agricultura, entre otros.


El financiamiento climático es un elemento clave para superar los desafíos que supone el combate del cambio climático y no comprometer el cumplimiento de los objetivos de desarrollo de los países. La provisión de recursos suficientes es elemental para financiar eficazmente la implementación de medidas urgentes tanto en el área de mitigación como de adaptación al cambio climático.