Compromisos para una Agenda Nacional de la Eficacia de la Ayuda

El Salvador se adhiere a la Declaración de París en mayo de 2009, justo antes de la toma de posesión del nuevo gobierno, asumiendo el país todos los compromisos establecidos en ella. En este período, existían algunas iniciativas de coordinación de cooperantes alrededor de programas de gobierno pero en general los avances en materia de eficacia de la ayuda habían sido mínimos.

En este sentido, el Gobierno de El Salvador crea el Viceministerio de Cooperación para el Desarrollo como ente rector de la cooperación, con el mandato institucional de orientar, promover y servir de enlace con la cooperación internacional hacia las prioridades estratégicas del país. De modo que, el gobierno asume la responsabilidad de construir junto con las y los actores del desarrollo en su conjunto, una estrategia nacional de cooperación que lleve al país a hacer un uso más eficaz y eficiente de la ayuda.

El Gobierno de El Salvador, está consciente que la aplicación de los principios de París exige un cambio de paradigmas que requerirá de las voluntades de los tomadores de decisión, de los representantes de organismos y países cooperantes, y de la sociedad salvadoreña en su conjunto.

En este ámbito, es necesario fortalecer las capacidades institucionales para hacer frente a los retos que París y Accra imponen, reconociendo al mismo tiempo que el país necesita avanzar en la construcción de un modelo de cooperación adaptado a sus necesidades, que le permita establecer relaciones más equitativas con el resto del mundo, definiendo una ruta para cumplir con los compromisos adquiridos con el objetivo de contribuir efectivamente a mejorar el nivel de vida de las y los salvadoreños.

Por tanto, dentro de los Compromisos para una Agenda Nacional de la Eficacia de la Ayuda, se establecen los compromisos puntuales a los que se apegan los actores nacionales del desarrollo que incluye a todas las instituciones del Gobierno de El Salvador, los socios para el desarrollo y las organizaciones de la sociedad civil nacional e internacional.

Los compromisos adoptados por cada uno de los actores se basan en acciones específicas, vinculadas cada una de ellas a los compromisos establecidos en la Declaración de París. Por lo que, en este documento se especifican todas aquellas acciones que evidenciarán en la práctica los avances y cumplimiento de estos principios establecidos.